Migraciones

Ni es un Pacto de Estado ni aborda la inmigración

20 Marzo 2014 | Archivado en Migraciones

En el día internacional de la eliminación de la discriminación racial, UGT quiere recordar que debatir sobre el control del acceso de las personas a fronteras españolas, no es debatir sobre inmigración, ni siquiera sobre la regulación de la inmigración.

Confundir la parte con el todo, tiene consecuencias negativas para la sociedad española, y hace olvidar que forman parte de la población española millones de personas de nacionalidad extranjera que, por distintas razones, están afrontando la crisis económica y el desempleo con más dificultades que el resto, y que al mismo tiempo, miles de personas salen de España para convertirse en inmigrantes en otros países por carecer de oportunidades en este país. UGT ha elaborado un informe “Desigualdad por nacionalidad en el mercado de trabajo” sobre la posición de las personas de nacionalidad extranjera en un mercado de trabajo que es precario y desigual para el conjunto de la población.

A raíz de los sucesos de la Ciudad Autónoma de Ceuta y posteriormente las entradas en Melilla, el Gobierno propone un pacto de estado sobre inmigración al resto de partidos políticos. Desde el punto de vista de UGT, esto no es un Pacto de Estado, ni su objeto es la inmigración.

Un Pacto de Estado siempre ha de nacer del consenso, y no del intento de elevar a asunto de Estado, una situación puntual en la que se cuestionan las decisiones del Gobierno. Todos sabemos cuáles son las causas profundas de la migración, tanto de la que recibimos en Ceuta y Melilla, como de la generamos, sobre todo en los últimos años, hacía otros países. La búsqueda de mejores condiciones de vida. Y cuales son las soluciones: la mejora de la situación de los países emisores para que la migración sea una opción, y no la única oportunidad, a veces, de conservar la vida. La implicación de la Unión Europea es necesaria, y también la de España, pero no solo en el control de las personas en las fronteras, sino sobre todo en la mejora de las condiciones de vida de los países origen de la migración, lo que requiere afrontar las raíces de estos movimientos migratorios, y nuestras responsabilidades (políticas, económicas, comerciales) en haber convertido a estos países en lugares en los que no es posible tener un futuro digno y en, algunos casos, ni siquiera vivir. Si todos sabemos cuáles son las soluciones, UGT no entiende cual es el objeto de este pacto de estado que se limita al control de personas en las fronteras, que nace de un hecho en el que murieron 14 personas y en que la actuación del Gobierno se ha cuestionado. A no ser, que este pretendido pacto, tenga únicamente por finalidad renunciar a las verdaderas soluciones que obviamente tienen efectos en el largo plazo y optar por la vía fácil, simplemente hacer lo necesario para que no entren. Una vía, por otra parte, que corre el riesgo de querer legitimar medidas y actuaciones para el control de fronteras, que no son asumibles, ni aceptables.

Un pacto que no es sobre inmigración, ni tan siquiera sobre regulación de flujos migratorios. Denominarlo así, confunde a la sociedad española de la que forman parte millones de migrantes, una sociedad que envía personas al exterior que somos, a su vez. inmigrantes en otros países. Si con el pacto, se pretende al mismo tiempo, endurecer la normativa en materia de extranjería, tomando como excusa la llegada de personas a Ceuta y Melilla, no habrá mucha diferencia entre nuestra actuación y decisiones como la de Suiza, que hace un año quiso limitar la entrada de españoles y que ahora ya anunciado que se salta los Acuerdos de libre circulación con la Unión Europea. No olvidemos que para ciertos países de la Unión Europea, los españoles somos “inmigrantes no deseados”, y que en la Unión hay un ascenso de los partidos de ultraderecha. Ayer mismo, la eurodiputada Marine Le Pen y un diputado belga presentaron una propuesta de resolución del Parlamento Europeo, para eliminar la Agencia de derechos fundamentales de la Unión Europea porque, entre otras razones la agencia recurre a métodos poco científicos, como equiparar la prohibición del hiyab con el racismo o adopta posiciones que no tienen nada que ver con los derechos fundamentales, como la defensa de voto para los extranjeros.

En cualquier caso, España ya ha tomado medidas para endurecer la vida de los migrantes, de quienes están y de quienes nos vamos, pero solo de quienes no tenemos más medios económicos que nuestro trabajo: deja sin asistencia sanitaria a los extranjeros sin autorización de residencia, endurece el acceso de todas las personas y aun mas de los residentes regulares a la sanidad, limita el acceso a las becas de los niños y niñas de nacionalidad comunitaria en una decisión claramente inconstitucional, elimina el prestaciones de la seguridad social y de asistencia sanitaria a españoles o no, que estén fuera del país más de tres meses, una medida que la Comisión Europea ya ha declarado que no es compatible con los reglamentos comunitarios. Por el contrario, ha puesto una alfombra roja a los inversores extranjeros, a las grandes empresas que quieren contratar a personal cualificado o no. Política de inmigración y emigración clasista, una para pobres y otra para ricos.

Si el Gobierno quiere abordar las causas de la migración que llega a las Ciudades Autónomas, con las soluciones que todos sabemos que son necesarias, entonces si necesitará un Pacto de Estado que, desde el consenso de todas las fuerzas políticas y de los interlocutores sociales, sirva para presionar en la modificación de las políticas de la Unión Europea, para implicar a las instituciones Europeas e internacionales y hacer frente a los grupos de interés que prefieren que África siga siendo un continente rico para los demás, pero pobre para sus habitantes. Si lo que quiere es otra cosa, por favor, que no hablen de Pacto de Estado, y que no lo llamen inmigración cuando quieren decir endurecer las fronteras.

Abordar la inmigración, implica, entre otras cosas, abordar la situación de las personas de nacionalidad extranjera que forman parte de esta sociedad, y cuya posición en el mercado de trabajo nunca ha sido buena, pero ahora se ha endurecido y empeorado, condicionando su posición en la sociedad, su protección social, su riesgo de exclusión y pobreza y su posibilidad de permanecer en este país de forma regular.

Datos más relevantes del informe “Desigualdad por nacionalidad en el mercado de trabajo”:

  • Según la Encuesta de Condiciones de Vida del INE, la tasa de riesgo de pobreza de la población extranjera no comunitaria, se incrementó desde el 34´7 en el año 2008 al 46 en el año 2012. La tasa de riesgo de pobreza de la población de nacionalidad española subió del 17´9 al 18´5 en el mismo periodo y la de población nacional de la Unión Europea del 28´6 al 31´2.
  • En el año 2013, los extranjeros no comunitarios constituyen el 9´1% del total de activos en España, y los extranjeros comunitarios el 9´1%.
  • Entre los años 2009 y 2013, la tasa de paro de la población extranjera no comunitaria aumentado del 32´16% al 40´25%, mientras que para la población extranjera nacional de los estados miembros de la Unión Europea, el aumento ha sido del 23´8% al 28´8%. La población española ha pasado de una tasa de paro del 16´8% al 24´3%.
  • En el periodo enero 2009 y enero 2014, la población de nacionalidad extranjera no comunitaria ha perdido el 24´5% de personas afiliadas a la seguridad social. La población española ha perdido un 10%. La pérdida afecta especialmente a los hombres no comunitarios, cuya afiliación desciende un 28´3%.
  • Las mujeres comunitarias son las únicas que aumentan su afiliación (9´7%), mientras que las españolas pierden un 5´1% y las no comunitarias un 19´7%.
  • El empleo doméstico se consolida como sector refugio de las mujeres de cualquier nacionalidad, aumentando la afiliación al Sistema Especial de Empleados de Hogar un 77´%, en el caso de las mujeres españolas, el 121´6% en el de las extranjeras comunitarias y el 16´4% en el de las mujeres de nacionalidad no comunitaria.
  • En diciembre de 2011, el 60´7% de las mujeres afiliadas al Régimen Especial de Empleados de Hogar, tenían nacionalidad extranjera. En enero de 2014 el porcentaje de mujeres españolas afiliadas al Sistema Especial ha aumentado hasta el 49´9%.
  • La contratación a personas de nacionalidad extranjera ha descendido del 22% en 2008 al 17´3% en 2013.
  • El aumento de la contratación indefinida en el colectivo de nacionalidad extranjera, y el incremento en general de la contratación de mujeres (del 37% al 37´4% entre 2008 y 2013), se debe a la contratación en el empleo doméstico. Contratación indefinida, pero por horas, sin cotización ni prestación por desempleo y con una indemnización que es la misma con independencia de que el contrato sea temporal o indefinido.
  • En el año 2012 las mujeres extrajeras cobraban un 43% menos que las mujeres españolas y los hombres extranjeros un 44´5% menos que los hombres españoles.
  • Los ocupaciones en las que es más alta la tasa de contratación de extranjeros en el año 2012 eran peones agrícolas en huertas, invernaderos, viveros y jardines (el 61´57% de la contratación) y en empleados domésticos (el 57´31% de la contratación).